Vivir en una de estas calles es casi un privilegio en la ciudad; las unidades que ahí se encuentran superan el valor promedio
Un bulevar es como un oasis en plena ciudad. “El de Charcas me recuerda a una calle de París -resume Leticia Rodes, vecina que vive sobre esa arteria desde hace casi 40 años-. Estoy encantada con la zona, rodeada de verde. Un oasis frente al cemento.” Y no se equivoca: el arquitecto Luis Grossman, director general de la Dirección de Casco Histórico de la Ciudad, cuenta que a principios del siglo XX, la burguesía porteña que viajaba a Europa importó el modelo de esta pieza urbana con raíces parisienses: “El término surge de una palabra francesa, vino de las obras que hizo en París el barón Haussmann. El bulevar es una pieza urbana que aparece no sólo en Buenos Aires, sino también en muchas ciudades del interior. Se comprende por bulevar una avenida ancha cuya área central está a salvo; los vehículos van en una y otra dirección, y ese pequeño espacio está rodeado de árboles; también bancos o incluso monumentos o estatuas”.
Gabriela Goldszer, de Ocampo Propiedades, explica las razones que atraen a la gente para tener en frente de sus departamentos áreas verdes. “Existe un deseo bastante generalizado en el mercado urbano de contar con algún contacto con el verde y en la ciudad no es tan fácil de lograr. En el caso de vivir sobre un bulevar se logra una amplitud de vista que la gente valora mucho. Hay familias que buscan unidades de 3 o más dormitorios, y hay parejas que buscan unidades pequeñas. Son dos puntos con público asegurado.”
Dos clásicos
El historiador Daniel Balmaceda cuenta que sobre Charcas, hasta 1966 funcionó una feria. Poco a poco, todo Palermo fue creciendo y hoy, según comenta Francisco Balsano, de la firma homónima, la zona es muy buscada: “Nosotros construimos edificios de departamentos grandes (3 o 4 dormitorios con dependencias de servicios) con buena recepción de la gente. Además, este bulevar tiene muchas ventajas: está cerca de Santa Fe, tiene fácil acceso al subte y otros medios de comunicación”. Otro aspecto que destaca es que un bulevar tiene la virtud de generar más amplitud y luminosidad.
Si bien el público busca lo mejor, no siempre el bolsillo puede hacer frente a lo que se busca. “Una unidad frente a un bulevar siempre costará más cara que en los alrededores. Si lo que se cotiza es razonable en valores se vende muy rápido porque hay demanda. Si tengo que elegir una unidad de 2 dormitorios y hay una sobre el bulevar, casi no hay dudas. Es un valor agregado muy importante.”
Sobre Charcas, las unidades rondan los 2000 dólares el m2 según el tipo de construcción, es decir, un 10 a 15% más que en las zonas aledañas. “Hay que tener en cuenta que sobre República Dominicana es más caro. Ahí se han construido edificios de mucho nivel, por Charcas hasta Salguero. Depende el tramo también varía el valor. Dominicana es un poco más cara entre Guise y Bulnes. Será un 5 o 6% más”, aclara Balsano.
También en Palermo, el bulevar Cerviño, inaugurado en 1985, es un ícono dentro de un barrio ecléctico donde la demanda aumentó en los últimos años gracias al movimiento comercial y gastronómico. Goldzer comenta: “Ambos bulevares son como la síntesis del barrio: edificios nuevos, comercios y restaurantes que muestran la fisonomía de un barrio dinámico. Las unidades preferidas son las que tienen vista al bulevar y si tienen balcón, mejor aún”. En cuanto a los valores, una unidad de 50 m2 al frente sobre Charcas alcanza los US$ 130.000 y sobre Cerviño puede llegar a los 150.000 dólares.
Sobre la avenida San Isidro, los nuevos bares y restaurantes han revitalizado la zona. Silvia Bacino, de Tizado Propiedades, asegura: “En los últimos años la demanda en este sector no sólo se incrementó, sino que se expandió hacia la avenida General Paz. Desde hace tres años se produjo un crecimiento comercial y un desarrollo de un pequeño polo gastronómico (cercano a San Isidro y Arias) con la instalación de restaurantes (Placeres Patagónicos, en Correa y San Isidro; Carlitos, en San Isidro casi esquina Arias; Chungo, en esa misma esquina, y Demetria, en Ramallo entre Moldes y San Isidro) y pequeños comercios que le otorgan un movimiento inusual a la zona”.
Respecto del sector, Bacino comenta que existen pocas construcciones nuevas debido a que el bulevar San Isidro tiene la característica que sólo permite construcción en altura sobre la mano impar. “La otra mano sólo permite edificios de tres pisos y un retiro, por lo cual las casas existentes tienen más valor como tales que como terreno”, dice.
Norma Visona, de Del Campo Propiedades, se refiere a los valores sobre esta calle: “Una unidad a estrenar parte en los 2200 dólares el m2; cuando nos referimos a usados, el valor desciende a 1800 o 1700 dólares, o incluso menos”.
En Belgrano
El bulevar Olleros se desarrolla en tres cuadras desde Avenida del Libertador hasta Luis María Campos. Jorge Safar, de Oppel Propiedades, comenta que en la zona se han desarrollado recientemente varios proyectos edilicios. La mayoría han sido edificios de tamaños intermedios de departamentos de 1 a 4 ambientes para vivienda. “Quedan muy pocas parcelas con posibilidades para construir edificios, por lo que la oferta de los mismos será menor con el paso del tiempo. Específicamente, sobre el bulevar, el último desarrollo fue un edificio de categoría con departamentos de cuatro ambientes más dependencia”, explica Safar.
A su vez, detalla que desde hace aproximadamente 15 años la zona se ha consolidado con un mix de viviendas y locales comerciales, para un segmento de alto poder adquisitivo: “En la zona, los valores en general están en relación con los precios de los nuevos emprendimientos, que generalmente superan los 2300 dólares el m2. Es decir, el valor del usado promedio en una zona siempre tiene una relación sobre el valor del inmueble nuevo en la misma zona. Como la tierra es cada vez más escasa y costosa, los nuevos proyectos también son más caros y esto provoca que los valores inmobiliarios generales del lugar acompañen esa suba”.
El bulevar Olleros está cerca de la zona conocida como La Imprenta. Es muy solicitado y las cotizaciones son altas. “Buscan unidades de 2 y 3 dormitorios con o sin dependencia, y cochera. Aquí la demanda de unidades chicas de hasta 50 m2 es alta, como el segmento de las de entre 100 y 200”, agrega Safar. En Olleros los valores promedio del m2 parten en los 1800 dólares y pueden llegar a 2500. “Una unidad de un dormitorio en buen estado de 40 m2, aproximadamente, en un edificio de buen mantenimiento cotiza alrededor de los 80.000 dólares.”
Cerviño también tiene su historia: por ahí pasaba el ferrocarril que unía Buenos Aires y Rosario. El tren atravesaba el Zoológico hasta que más adelante decidieron modificar el rumbo. Quedó el espacio de Cerviño vacío y por un tiempo, en la década de 1920, se utilizó como picadero para varear caballos trotadores. Más adelante albergó una feria franca que funcionaba de martes a sábado. Cuando se retiró la feria, la parcela quedó abandonada a su suerte y luego convertida en bulevar por la acción de los vecinos, que se inauguró en 1985.
Guadalupe Fernández Fronza , 14 de agosto de 2010.
Publicado por La Nación.