En busca de una solución – Efecto Cedin entre los players

Brokers y desarrolladores consideran positiva la iniciativa respaldada por el Gobierno, pero es necesario una implementación ágil y rápida.

Después de meses de difundir recurrentemente en distintos medios sobre la necesidad de tomar alguna medida para recuperar al sector inmobiliario -que en su conjunto padece los efectos del cepo cambiario sumado al complejo escenario económico-, representantes de la actividad inmobiliaria se reunieron con autoridades del Gobierno en busca de un camino que ayude al mercado a salir de su evidente caída. Las autoridades nacionales propusieron como alternativa relanzar el olvidado Cedin como una opción para activar el sector, lo que exige ajustar los pasos para que ese certificado se utilice de manera ágil en la operatoria inmobiliaria.

Es natural que esta nueva situación genere expectativas, algunas más optimistas que otras, aunque todos desean que esta vez el Cedin resulte exitoso.

Fabián Lusarreta, director de Ribera Desarrollos, no dudó en afirmar que “desde el sector creemos que será positivo el relanzamiento del Cedin anunciado la semana última y particularmente desde el proyecto Alrío. Seguramente acelerará nuestro ritmo de venta”. Este mismo entusiasmo lo comparte Alberto Fernández Prieto, titular de Fernández Prieto y Asociados. El developer admitió que “tenemos fe en el relanzamiento del Cedin. Creo que es una herramienta que debería reactivar de forma rápida el mercado teniendo en cuenta que brinda la posibilidad de aquellos que tienen dólares sin declarar los puedan incorporar al circuito económico nuevamente. El instrumento debería tener una aceptación mayor de la que tuvo. Esta vez creo que con el impulso de los bancos tendrán mejor recepción”.

La mirada del presidente de la Cámara Inmobiliaria, Roberto Arévalo, es también optimista. “Luego de dos reuniones con el jefe de Gabinete, cuando la CIA planteó la crisis del mercado inmobiliario finalmente ante el gobierno nacional se acordó trabajar con la única herramienta posible, el Cedin, sobre la base de ser un instrumento para el mercado, con pautas que generen confiabilidad, certeza y sustentabilidad.”

El directivo agregó que el 21 de julio último se elevó la propuesta con la presencia de autoridades del Banco Central, institución clave y excluyente en la operatoria. Y destacó que “luego de tres años, el Gobierno nos escuchó y a la vez aceptó finalmente el calamitoso estado del mercado inmobiliario”. Según Arévalo fue importante contar con la presencia del titular del Banco Central acompañado por el gerente general, además de otros representantes y entidades financieras del país. Entre otros aspectos consideró algunas modificaciones necesarias para la operatoria y se acordó la participación conjunta con las prestigiosas instituciones que reúnen a la actividad inmobiliaria.

Modificar el pasado

José Azpiroz Costa, director de Inmobiliaria Bullrich, recordó: “El Cedin no tuvo éxito. Si bien la instrumentación de las operaciones no fue en cámara lenta, las pocas que se realizaron llegaron a su fin, tal como le hemos explicado a nuestros clientes. El comprador se llevaba el título y el vendedor, los dólares. Aun así para el vendedor había un tiempo que no es el inmediato de las operaciones tradicionales: es decir que ante la entrega del título recibía en el momento la moneda de cambio. El hecho de que los bancos privados tengan un aliciente ahora no hará que el pensamiento del vendedor cambie sustancialmente. Siempre querrá la simultaneidad. Además, una duda que jamás podremos despejar es qué tesitura tomarán las próximas administraciones respecto de quienes utilizaron el Cedin”. Consideró que la solución es la compraventa simultánea: billetes-título. Y agregó: “Debo decir que nunca una operación se truncó por alguna circunstancia. Pero al margen de este resultado, el mercado jamás asimiló la operativa”.

Resultados

Con actitud expectante ante este relanzamiento del que habla todo el mercado en estos días, Facundo Soldati, gerente de la sucursal Botánico de Soldati, se mostró optimista: “El Cedin me parece una medida interesante siempre que convierta a los bancos en aliados del sector en el momento de incentivar y concretar la operatoria con este instrumento”. Coincidió con otros brokers en que “el próximo paso necesario para que se extienda el Cedin sería que la parte vendedora pudiera cobrar los dólares en simultáneo con la firma de la escritura. Ese desfase que se produce hoy, que puede ocupar varias horas, es el motivo principal por el cual muchos vendedores son reticentes a aceptar esta modalidad de pago. Sin duda, el hecho de tener el dinero arriba de la mesa en el momento de firmar ante el escribano aumentaría radicalmente su utilización.”

La vicepresidenta de Korn Propiedades, Mabel Korn, fue contundente: “Creo que el relanzamiento del Cedin será productivo para la actividad inmobiliaria. En definitiva es otra oportunidad. Es una ventaja que el banco cobre por este servicio, lo que ayudará a que brinden información a las consultas de los clientes, que antes no realizaban y generaba incertidumbre. Sería afortunado encontrar la forma de usarlos también en los departamentos de pozo”. La posición de Héctor D’Odorico, presidente de Cucicba, es positiva y enfatiza “la importancia de trabajar entre las entidades en conjunto para generar una respuesta que beneficie al mercado y, desde luego, a la gente”. Admite que “hubo dificultades en la implementación del Cedin, pero el hecho de que las autoridades nos escuchen podemos encauzar dentro de la ley una solución para que se destrabe el mercado. Se advierte una predisposición de las partes involucradas (incluyendo entidades bancarias como ABA y Adeba) a que nos sumemos a trabajar en la reactualización del certificado”.

Jorge Toselli, presidente de JT Inmobiliaria y prosecretario de la CIA aportó su mirada sobre el tema. “Fue muy importante la reunión del lunes último en el Banco Central junto con la Cámara Inmobiliaria Argentina (la entidad tuvo un papel de liderazgo ya que es justo reconocer que fue la que inició todo el movimiento y llevó el proyecto del nuevo instrumento de pago Cedin) además de otras inquietudes antes las autoridades del gobierno nacional. “A esa reunión con el titular del BCRA asistieron además escribanos del Colegio de la Capital y de la provincia de Buenos Aires, los bancos y otros colegios inmobiliarios de la Capital y la provincia de Buenos Aires. Para Toselli, “la principal objeción para agilizar es que el Banco Central remita los dólares que respaldan al Cedin en el momento de la escritura, presentando copia el escribano interviniente un día antes de la operación y no dentro de los cinco días, como ocurría hasta ahora. Algo fundamental de destacar es que los bancos dejen de informar el Reporte de Operación Sospechosa (ROS) a toda transacción realizada con el Cedin ante la Unidad de Información Financiera (UIF)”. Y luego agregó: “Todas las operaciones suscriptas por dicho medio se reportaban como operaciones sospechosas ante la UIF, trámite que de ahora en más el sector inmobiliario considera eliminar como cláusula principal. El cambio de nombre del Cedin por sugerencia de la CIA, que se denominaría título público inmobiliario, dejaría bien en claro que la operatoria en cuestión serviría única y exclusivamente para la compra de bienes inmuebles. Cuando la presidenta de la Nación realizó la exposición de la presentación del Cedin anunció con carácter de exclusiva que desde ahora tendría un cargo a ser abonado por el comprador (en principio) del 1,5% la emisión del instrumento y otros servicios ligados a ese concepto, cuando hasta ahora se hacía en forma gratuita”.

Toselli explicó también que al margen de lo solicitado y de otros temas vitales para analizar, se solicitó a las autoridades del Banco Central la necesidad de que difunda de manera clara en los medios, para que los posibles interesados se informen a la brevedad del nuevo funcionamiento de este instrumento que ahora sí podría ser una buena alternativa de ventas para el último cuatrimestre del año. “Si todas las reformas se instrumentan antes del 30 del actual tendríamos cuatro meses por delante, que serían utilizados en forma fructífera”, concluyó.

Por Adriana B. Anzillotti, Sábado 16 de agosto de 2014
Publicado en el suplemento Propiedades & Countries del diario LA NACION