En Lanusita se construyen desarrollos residenciales y comerciales destinados a un segmento ABC 1; los departamentos nuevos se cotizan en 66.000 dólares.
Caracterizado por sus industrias y sus habitantes de típica clase media, Lanús muestra un cambio rotundo desde la última década. Avanza con desarrollos habitacionales y comerciales que propician el arraigo de vecinos ABC 1, industriales, comerciantes, empresarios y profesionales, que a la vez son los principales inversores.
“En el sector Oeste, a un par de cuadras de la estación, comenzaron a tomar fuerza los desarrollos ya que aparecían como una buena alternativa de inversión tras la crisis de 2001, cuando vecinos de buen poder adquisitivo comenzaron a canalizar sus ahorros en fideicomisos para edificios en altura”, comentó Hernán Cordero, socio propietario de J. Cordero e Hijo Operaciones Inmobiliarias.
“Por la alta concentración de gente en pocas cuadras, en un barrio que mantenía el formato de casas bajas, se amplió la posibilidad de elección de lotes más alejados de la estación de tren, lo que produjo una especie de explosión de emprendimientos gastronómicos y comerciales de magnitud”, destacó el mismo comercializador. A la tradicional Pizzería Aniello se le sumaron La Quintana, Café Martínez, La Farola Express, Lo de Carlitos, restaurantes de cocina internacional y locales de indumentaria, boutiques y salones de belleza, con centro en la calle del Valle Iberlucea.
“La fisonomía cambió con la llegada de los edificios, muchos de alto nivel y con amenities -explicó Jorge Antúnez Vega, presidente de la comercializadora Antúnez Vega SA-. Para continuar construyendo deben adquirirse casas o edificios afectados a usos industriales, con valores que oscilan entre los 3000 y 3500 pesos el m2, según la ubicación y la incidencia de la tierra.”
Pero Lanusita, como designan a este barrio vecinos y emprendedores, emulando a Las Lomitas, en Lomas de Zamora, está al borde de la saturación. Por eso se va extendiendo desde Yrigoyen hacia las vías del tren y hacia el centro de Lanús Este.
Como en otros sectores, el mercado inmobiliario está aletargado. Por eso el titular de Pinar Propiedades, Alejandro Siporín, analizó: “Al subir el dólar marginal y al haber inflación, y al no haber créditos hipotecarios, al que ahorra para acceder a su vivienda se le hace casi imposible poder comprar. Para colmo, desde hace dos años, por la creación del cepo al dólar, los inversores buscan otros resguardos porque la rentabilidad se tornó baja”. Y lo justificó con un ejemplo: “Un departamento céntrico de 900.000 pesos se alquilaba en octubre a 2500 pesos mensuales”.
Los brokers coinciden en que tampoco el Cedin ofreció una alternativa positiva, por lo que Jorge Antúnez Vega comentó: “Se necesita estimular el acceso a la vivienda de manera fluida y ágil, lo que llevará a que crezcan las inversiones. En ese sentido, Lanús es excelente opción por estar en pleno despegue a nivel residencial y comercial y cerca de la Capital”.
Los valores de los departamentos céntricos a estrenar promedian los 66.000 dólares, como en Terrazas de Lanús, complejo de dos torres de cuatro pisos, en Aristóbulo del Valle 547. En los edificios con amenities de categoría oscilan entre 1800 y 2000 dólares el m2 promedio, como en Tiziano, de 11 pisos, en 2 de Mayo 2978, y en Gales IX, de nueve pisos, en Moreno 173. Los usados rondan los 15.500 pesos el m2. En cuanto al costo de las casas es muy variable, porque depende de la tipología, el estado, los años de construcción, los servicios y la ubicación.
Límites y restricciones
El sector que comprende Lanusita está limitado por la avenida Hipólito Yrigoyen, Carlos Tejedor, 2 de Mayo y Presidente Quintana. “Esto se circunscribe a la zona que posee cloacas y de alta densidad, que tiene un FOT 3, donde se puede construir tres veces la superficie del terreno; luego baja a FOT 2,5 y más alejado, a FOT 1,8 en zona con cloacas”, explicó Hernán Cordero.
Hace un año, el Concejo Deliberante de Lanús sancionó una ordenanza con restricciones para los desarrollos, limitados a nueve pisos. Modificó los lados mínimos de ambientes y estableció que por cada tres unidades debe haber, mínimo, dos cocheras. “Las restricciones sirven para controlar mejor la asistencia de fluidos como luz, gas y agua, y para no saturar los desagües cloacales”, concluyó el broker.
Por Juan Manuel Raimundo, Sábado 09 de noviembre de 2013
para el suplemento Propiedades & Countries del diario LA NACION