La venta de propiedades creció casi un 20% en el primer trimestre del año. No obstante, el 95% de las compras se realizan en efectivo.
El presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA), Néstor Walenten, aseguró ayer que el primer trimestre de actividad del sector cerró “con números satisfactorios”, dado que las operaciones crecieron entre “un 15 y un 20%” en el país respecto del mismo período de 2010.
Pero el dato esconde una particularidad que muestra una deuda del sistema bancario: del total de operaciones, el 95% se realiza con dinero en efectivo y sólo el 5% con créditos hipotecarios.
“Los buenos precios a nivel internacional de nuestros granos y los buenos rindes de la cosecha se derramaron en el sector inmobiliario y en otros rubros como electrodomésticos, automotores y maquinaria agrícola”, explicó el empresario.
El titular de la Cámara Inmobiliaria añadió que “el mercado se está movimiendo merced al inversor tradicional o la típica ‘Doña Rosa’, que frente al aumento de los precios resguarda sus ahorros en la compra de inmuebles”.
Respecto de los inmuebles que son más buscados por los inversores, Walenten explicó que “la base piramidal de la demanda son los departamentos chicos, de uno, dos y tres ambientes” y reconoció que “a falta de crédito hipotecario accesible, lo que dinamiza el mercado es el inversor, más que el consumidor final”.
Por su parte, Armando Pepe, presidente del SOM, explicó a Tiempo Argentino que el perfil del tomador de créditos “es de una persona medianamente joven, de clase media, al que le faltan U$S 30 0 40 mil para comprar un departamento que ronda los U$S 100 mil”.
Según Pepe, el 50% de los compradores son consumidores finales y el otro 50% inversores que compran para poner en alquiler. De todas formas, el empresario recomienda tomar préstamos: “es más conveniente que gastarse los dólares ahorrados –dijo Pepe–, ya que hoy, los bancos Nación, Provincia y Ciudad tienen créditos interesantes en pesos y con tasa fija. Sin embargo, la gente tiene miedo”.
No obstante, las estadísticas indican que en la práctica los bancos que operan en la Argentina otorgan cada vez menos créditos hipotecarios a los clientes de clase media, según indica un reciente informe del Centro de Economía y Finanzas para el Desarrollo de la Argentina (CEFID-AR).
El estudio indicó que las entidades bancarias destinaron el mes pasado el 7,2% de su cartera para financiar la compra de viviendas, mientras que en el mismo mes de 2005 habían destinado el 13,6%.
Los bancos destinaron durante enero $ 11.898 millones a préstamos hipotecarios, mientras que, para los créditos personales, alcanzaron los $ 40.583 (24,4%) millones, y el dinero dirigido a las compras con tarjetas de crédito alcanzó los $ 27.470 millones (26,5).
Las líneas para financiar las adquisiciones de viviendas representaban el 13,6% en 2005; el 9,7% en 2006; el 8,2% en 2007; el 7,8% en 2008; el 8,5% en 2009 y el mismo nivel en 2010.
Entonces, todo indica que uno de los problemas centrales para darle más impulso a la compra-venta de viviendas sigue siendo la escasa presencia de líneas de financiamiento que permitan dinamizar el negocio entre los sectores medios y asalariados de la población.
Publicado por Tiempo Argentino, 4 de abril de 2011.