Temidas expensas

Gastos que suben

Mientras crece el descontento entre las asociaciones de copropietarios, las estimaciones de distintas cámaras y sectores indican que los aumentos salariales que se les otorgarán a los encargados de edificios implicarán un aumento en las tarifas que rondará entre 17 y 22 por ciento. La inflación real, otro tema que influye

El tema parece recurrente, pero cada vez que cobra fuerza genera repercusiones debido a su incidencia directa en los bolsillos de propietarios e inquilinos. Es que los ajustes salariales de los encargados de edificio no son menores.

De hecho, se espera que en los próximos días, cuando el sindicato que los agrupa (el Suterh) concrete la reunión suspendida el 14 del actual para negociar reajustes salariales, haya novedades. Se habla de un incremento de entre 17 y 22% en los sueldos de estos trabajadores, lo que repercutiría en las expensas y, directamente, en los montos a pagar.

Mientras las distintas asociaciones de copropietarios instrumentan diferentes maneras de dar a conocer su descontento con esta posibilidad, los responsables de las federaciones y gremios que congregan a los trabajadores de edificios de renta y propiedad horizontal (Fateryh, Suterh y Osperyh) coinciden en señalar que “desde diciembre pasado, cuando se acordaron dos sumas fijas no remunerativas en enero y febrero, no ha habido incremento salarial alguno y, sin embargo, las expensas ya aumentaron. No queremos ser siempre los malos de la película. Si las expensas aumentan hay que buscar la razón en otra variable que no sea el sueldo de los encargados, porque no siempre obedece a esta causa”, dicen.

Daniel Tocco, presidente de la Cámara Argentina de la Propiedad Horizontal y Actividades Inmobiliarias, entidad que “desde siempre es parte de esta negociación paritaria por la parte patronal”, explica que “la incidencia del costo salarial en las expensas es del 50 por ciento. En consecuencia, de hacerse realidad el anunciado incremento, las expensas se verían modificadas en alrededor de un 10 por ciento”. Aclara, también, que el convenio colectivo de trabajo vigente vence el 30 del actual y que las conversaciones para uno nuevo comenzarían el mes próximo: “Seguramente, el acuerdo recién se habrá firmado en junio. Lo mismo sucedió en 2009, cuando el aumento se decidió sobre la mitad del año y se aplicó con retroactividad a mayo”, comenta.

Por su parte, Enrique Abatti e Ival Rocca (h.), abogados especializados en derecho inmobiliario y presidente de la Cámara de Propietarios de la República Argentina y vicepresidente del Centro Argentino de Derecho Inmobiliario y Propiedad Horizontal, respectivamente, entienden que cuando se habla de expensas no puede dejar de aludirse a la inflación: “Las expensas son un fiel reflejo de la realidad económica, porque fatalmente deben acompañar el costo de vida, desmintiendo los números del Indec. Todos los días, los consorcios gastan en comprar los artículos de limpieza y otros insumos de uso cotidiano o necesitan hacer reparaciones, reemplazar elementos deteriorados. Todo tienen que pagarlo con los aumentos de la inflación real, negada irracionalmente por la autoridad económica. Resulta entonces imposible que, más allá de que los salarios y aportes para el personal del consorcio se incrementen, las expensas dejen de encarecerse”.

¿Soluciones?
Abatti asegura que “una buena administración con eficaz seguimiento y colaboración del consejo de propietarios siempre ayudará a mantener un presupuesto sustentable para bolsillos de copropietarios e inquilinos”.

Además, coincide con Rocca y Loisi en la falta de representación real de los consorcios en la negociación paritaria. “Los administradores cobran honorarios a los consorcios, entonces resulta absurdo que sean las asociaciones que los reúnen las que se sienten a negociar con los trabajadores. El meollo de todo este asunto es la ley 14.250 de convenios colectivos, que no ha reglamentado la participación de los consorcios y admite que los administradores vayan a las paritarias a pactar cargos sobre las espaldas de sus mandantes, los consorcios. Estos pagan los salarios de los encargados y también los honorarios de los administradores. Eso no es una negociación; es daca y daca y daca…”, expresa Loisi.

Por su parte, Daniel Tocco afirma: “La decisión respecto de quiénes se sientan a la mesa de negociación no es nuestra. Los responsables de la Cámara de la Propiedad Horizontal y Actividades Inmobiliarias entendemos que éste es un tema que define el Ministerio de Trabajo y dejamos clara nuestra posición en cuanto a que a la paritaria se sumen nuevos actores de la parte patronal, no es ni por sí ni por no”.

El debate está planteado; la posibilidad de que las expensas se incrementen en los próximos meses, también.

Paula Gómez. 24 de abril de 2010
Publicado en La Nación