Vivir en una de estas calles es casi un privilegio en la ciudad; las unidades que ahí se encuentran superan el valor promedio
Un bulevar es como un oasis en plena ciudad. “El de Charcas me recuerda a una calle de París -resume Leticia Rodes, vecina que vive sobre esa arteria desde hace casi 40 años-. Estoy encantada con la zona, rodeada de verde. Un oasis frente al cemento.” Y no se equivoca: el arquitecto Luis Grossman, director general de la Dirección de Casco Histórico de la Ciudad, cuenta que a principios del siglo XX, la burguesía porteña que viajaba a Europa importó el modelo de esta pieza urbana con raíces parisienses: “El término surge de una palabra francesa, vino de las obras que hizo en París el barón Haussmann. El bulevar es una pieza urbana que aparece no sólo en Buenos Aires, sino también en muchas ciudades del interior. Se comprende por bulevar una avenida ancha cuya área central está a salvo; los vehículos van en una y otra dirección, y ese pequeño espacio está rodeado de árboles; también bancos o incluso monumentos o estatuas”.



Si parafraseamos lo que cantaba Carlos Gardel: Ya no sos mi Margarita, ahora te llaman Margot, podríamos imaginarnos que un antiguo habitante del barrio como el célebre escritor Jorge Luis Borges expresaría: Ya no sos mi Palermo Viejo, ahora te llaman Palermo SoHo y Hollywood. Con todo lo que representa esto por los designios comerciales e inmobiliarios que aggiornaron el tradicional barrio porteño. Una nueva versión del apart hotel ahora se denomina condo-hotel, según la modalidad que comenzó a utilizarse en Estados Unidos, España y Brasil. En definitiva, es lo mismo que antes, sólo que con servicios y comodidades adaptados a la vida moderna y con mayor categoría.