El crecimiento poblacional de los últimos años impulsó al mercado inmobiliario a desarrollar proyectos en altura de hasta diez pisos, según los barrios.
Casaquintas, chalets, casas bajas, conformaban la fisonomía de la localidad de José María Ezeiza hasta que dejó de ser parte del partido de Esteban Echeverría. En octubre de 1995 se creó, por ley provincial, el municipio que lleva su nombre, pasando a ser la ciudad cabecera, con más de 100.000 habitantes. Diez años después se inauguró la actual moderna sede de la Intendencia, lo que impulsó el mayor desarrollo inmobiliario que se acrecienta por estos días. Primero fue un edificio de cuatro pisos y luego le siguieron otros similares o de menor altura, hasta que se modificó la ruta aérea de los aviones que aterrizan en el Aeropuerto Internacional, lo que permitió la construcción de tres edificios de ocho pisos, con otros más en proyecto.
A ese impulso se sumó la tendencia de crecimiento a nivel nacional del mercado inmobiliario fomentado, según Graciela Vidal, responsable de Vidal Propiedades, “por las condiciones económicas que tomaron este sector como un resguardo de valor, el aumento sostenido de la población además de las características propias de Ezeiza, que ofrece la tranquilidad de ciudad pequeña, seguridad, espacios verdes y el rápido acceso a la Capital, distante a 37,4 kilómetros”. Según Roberto Mariani, titular de Mariani Bienes Raíces, “las principales vías de ingreso son la ensanchada ruta 205 -actual avenida Presidente Néstor Kirchner- y la autopista Jorge Newbery que conecta directamente a la Riccheri”.
Este broker señaló dos tendencias en el mercado inmobiliario local: “Por un lado, los inversores de distintos sectores como los usuarios de clase media, parejas jóvenes o de adultos mayores, aun de localidades distantes y de la Capital, son los que adquieren las nuevas unidades”. Y prosiguió: “Por otro lado, con la instalación del Complejo Penitenciario Federal Nº 1 se acrecentó la demanda de alquileres de casas y departamentos por el numeroso personal que allí trabaja y que proviene de lugares alejados, más los que se desempeñan en el aeropuerto”.
Por la cercanía de la estación aérea, las edificaciones se encuentran sobre rutas comerciales de vuelo, lo que genera una serie de restricciones para la construcción, en especial cuando la altura excede los 8,5 metros (entre dos y tres pisos). “Es requisito para la habilitación poseer la autorización otorgada por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), que evalúa la incidencia de cada proyecto, por lo que en el área central la altura máxima permitida es de 27 metros (ocho a diez pisos)”, explicó Vidal. Por eso la construcción de inmuebles de esas características posee un perímetro autorizado que abarca el centro de Ezeiza, comprendido por aproximadamente 64 manzanas circunscriptas a las calles Las Heras, Tuyutí y Emilio Mitre, en el sector norte, y por las arterias Pravaz, Centenario y Teodoro Fells, en el Sur.
“Habitantes y autoridades procuramos cuidar las características esenciales de nuestro pueblo para mantener la calma, las frondosas arboledas en las calles y en los paseos públicos; son vitales los espacios verdes”, comentó Jorge Sánchez, vecino del lugar.
Mariani agregó: “La seguridad es otro punto esencial, resguardada con un efectivo sistema de videocámaras instaladas en lugares estratégicos y con numerosos patrulleros recorriendo la zona permanentemente”. El propio comercializador reconoció: “No podemos negar que acontecen algunos hechos delictivos, pero son de ínfima proporción en relación con lo que se vive en otros distritos”. Al ampliarse el espectro habitacional se generan mayores demandas desde lo comercial, por lo que algunos edificios ofrecen locales en PB y viviendas en los pisos superiores, a lo que Ricardo Bustamante, titular de RB Propiedades, acotó: “La peatonal Ramos Mejía, de 100 metros, que nace en la estación, es la que concentra la mayor actividad mercantil, aunque ahora el foco se va extendiendo a calles adyacentes, con marcas de nivel”.
Entre los nuevos desarrollos se presenta Torre Le Dum, con destacados amenities. Sobre los valores, “los proyectos nuevos oscilan entre los 10.000 y 15.000 pesos el m2, particularmente en fideicomisos”, amplió Vidal.
Mariani añadió: “En los barrios cercanos al centro se advierte falta de lotes grandes, entonces en muchos casos se adquieren casaquintas para luego construir en esos terrenos condominios”. Vidal opinó: “Aún existen lotes céntricos que se comercializan entre 300.000 y 400.000 pesos”. Los alquileres de unidades nuevas de dos dormitorios oscilan entre 3000 y 3500 pesos, y para las de un dormitorio entre 2500 y 2700 pesos, más gastos de expensas. La locación de las casas, desde los 3500 pesos.
Por Juan Manuel Raimundo, Sábado 26 de abril de 2014
Publicado en el suplemento Propiedades & Countries del diario LA NACION