Las escrituras subieron un 16 por ciento. Pero aún lejos del récord del 2006.
Después de la crisis del año 2009, el mercado inmobiliario de la provincia de Buenos Aires comenzó a desperezarse. Quizás con cierta parsimonia respecto a lo que ocurrió en otros puntos del país, en particular la Capital Federal. Pero mostrando una performance auspiciosa, que tendría su arrastre positivo para el año en curso. El pasado, se formalizaron un 16 por ciento más de operaciones, prueba que el párate que venía sufriendo el sector de construcción y comercialización de unidades quedó atrás gracias a una demanda firme. Más aún: se superó el promedio que esos registros tuvieron en la última década. Según los datos proporcionados por el Colegio de Escribanos de la Provincia de Buenos Aires, en el
2010 ser concretaron 122.681 registraciones, lo que implica un 9,8 por ciento por encima del promedio de los primeros diez años de este siglo. Aún así, falta camino por recorrer.
Esa mejor performance no resulta suficiente para equipara, siquiera, los números de años anteriores como el 2005,2007 y 2008 y está todavía lejos del record batido en el 2006, el mejor año para el territorio bonaerense, cuando se llegaron a vender 140.841 propiedades. Eso significa un 12,8 por ciento por encima de las operaciones que se realizaron el año pasado.
Si se pone la mira al volumen de dinero involucrado en esas transacciones, el 2010 también surge como un momento de bonanza: se formalizaron transacciones por un total de 19.722 millones de pesos, superando en un 22 por ciento la cifra con que había cerrado el año anterior.
Si se calcula el valor promedio de cada transacción a partir de ese dato, resulta que una propiedad en territorio bonaerense costó en promedio unos 40.190 dólares. Monto sensiblemente inferior a los 100.900 dólares del precio consagrado en cada transacción realizada en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Vale decir que se trata de valores promedio y figurados para cálculos estadísticos que enmascaran como todas las generalizaciones lo que ocurre luego al interior del universo: existen diferencias abismales entre los precios de cada operación, ligados al tamaño y localización de la unidad comercializada.
Otra diferencia importante que surge al comprar lo ocurrido en territorio bonaerense vs la Capital es el dinamismo comercial del rubro. Mientras que tras la General Paz se concreta una operación cada 127 habitantes, en la Ciudad comandada por Mauricio Macri se realiza una cada 33.
Otro dato revelador de las estadísticas es que la modalidad de compra con créditos hipotecarios sigue siendo marginal, a menos en relación a la envergadura que tiene ese instrumento en otros mercados del mundo. La cantidad de hipotecas en el territorio bonaerense viene derrapando desde el 2007 y está a apenas un quinto de las registradas en el año 2000.
Durante el año pasado, el 11,9 por ciento de las compraventas de propiedades se realizó con hipotecas, leve mejora respecto al 10,5 por ciento del año anterior, pero aún una proporción extremadamente modesta.
Las perspectivas para los próximos meses son en la provincia tan auspiciosas como en el resto del país. Sólo la víspera electoral podría frenar el ascenso.
Fuente: Buenos Aires Económico (17/02/2011) – Página: 2 / Provincia Económico.