Tras la caída del cepo inmobiliario los diferentes actores del Real Estate local se muestran esperanzados y auguran un resurgir de la industria.
Algunas de las primeras medidas del nuevo gobierno junto con el levantamiento del cepo comenzaron a dar forma a un nuevo escenario inmobiliario. Para muchos de los referentes del sector empezaron a soplar nuevos vientos que prometen reactivar este amesatado mercado.
Según los brokes la tan esperada demanda contenida está apareciendo, cada vez hay más consultas de un público muy informado que estaba esperando el momento justo para invertir. “Nosotros vemos realmente positivas las expectativas del mercado para 2016. Ya desde el resultado de las presidenciales se evidencio un cambio aumentando considerablemente las consultas por propiedades usadas, las cuales fueron las mas relegadas en los últimos años, como también la concreción de terrenos para realizar proyectos inmobiliarios”, sostuvo Juan Ignacio Mel. gerente comercial de la firma Mel Propiedades.
Diego Migliorisi de la inmobiliaria homónima coincide con Mel y augura que en poco tiempo el mercado comenzará a dar gestos de reactivación. “Luego de varios años de poca movilidad en el mercado inmobiliario, la posibilidad de comprar dólares está despertando el interés del público. Ha sido un gran gesto de confianza para el mercado especialmente para las ventas. A partir de marzo se va a empezar a notar signos de recuperación”, explicó Migliorisi.
Los diferentes actores del Real Estate local dan cuenta de una gran expectativa para 2016. “Todavía no se puede medir la demanda concretamente ya que es muy reciente. Lo positivo es que en la economía real ocurre lo que la gente cree que va a suceder, es decir que la expectativa juega un importante papel”, dijo Mariano Oppel, presidente Oppel Inmuebles.
Buenas señales
El nuevo año, según Hernán Siwacki, socio gerente de Capital Brokers Propiedades, está plagado de gestos que permiten ser optimistas. “En estos días de 2016 notamos mucho entusiasmo por parte de todos los jugadores del sector, desarrolladores, usuarios, brokers, todos con ganas y recursos para hacer buenos negocios. Mientras que los usuarios buscan optimizar sus ahorros y comprar mejor, los desarrolladores defienden sus inversiones en dólares, y los brokers tenemos para gestionar operaciones. Todas estas son señales positivas, pero aún existen datos preocupantes como la inflación y el aumento de costos”, dijo Siwacki.
El nacimiento del cambio
Y agregó: “Por el lado de los usuarios, las consultas por unidades usadas se incrementaron sustancialmente. A poco más de un mes del nuevo gobierno la concreción de operaciones vienen en ascenso lo que permite augurar un futuro promisorio”.
Algunos de los inmobiliarios consultados coinciden en que lo primero que se reactivará será la construcción, en especial reaparecerá el inversor que era el que permitía realizar una preventa de un edificio en un corto plazo. Esto se deberá al cambio de expectativas que ya se evidencia en el. Un ambiente de negocios más amigable, un dólar estable y de fácil acceso y un mercado líquido en busca de inversiones rentables y seguras, parece ser la fórmula que permitirá dinamizar el segmento inmobiliario. Poco después, debería reactivarse el segmento del mercado de unidades chicas usadas y a estrenar, las cuáles están apuntadas a inversores de renta y consumidores finales. Este efecto con el tiempo continuará derramándose al resto de las tipologías.
Para Siwacki los proyectos que primero recibirán el impulso serán aquellos con buena ubicación, entorno, categoría, y calidad de servicios. “Estos son los factores que responden a una tipo de proyectos que subirán primero sus precios antes que el resto”, contó Siwacki.
Carlos Spina gerente comercial de Argencons está convencido que existe un público para cada proyecto aunque podría generalizarse que el año último el mercado contó con un sólo tipo de cliente. “La mayoría de las operaciones inmobiliarias de 2015 fueron realizadas por consumidores finales. Y en lo relacionado con el tipo de unidades las más buscadas fueron las de mayores dimensiones, destinadas claramente al usuario final. Para resaltar podría agregar que muchas de las operaciones de 2015 fueron realizadas por medio del Cedin”, afirmó Spina.
Por su parte, Gustavo Llambías, socio de la desarrollador Red cree que para un regreso fuerte de la compra de inmuebles por parte de las familias hace falta el crédito hipotecario: “Salvo las del segmento más alto, las familias necesitan créditos, que se han anunciado pero que seguramente demorarán un tiempo en hacerse efectivos”.
Todos coinciden en que la demanda contenida de la que tanto se habló en los últimos meses está empezando a soltarse y buscar las mejores opciones de compra. “Estamos ante una demanda que conoce perfectamente la oferta del mercado y que esperaba este momento para dar el zarpazo”, analiza Francisco Altgelt, vicepresidente de Altgelt Negocios Inmobiliarios.
Precios
Hasta ahora los precios se han comportado en forma diferente según sea un desarrollo nuevo o un inmueble usado. Según Martín Fabiani, gerente comercial de Ayres Desarrollos los precios de ventas de proyectos finalizados (casas, lotes, departamentos y oficinas) se han mantenido, mientras que los proyectos de pozo han ido aumentando gradualmente de acuerdo al índice de la construcción (CAC). En cambio, en lo que respecta a los alquileres todos afirman que han aumentado. “Habrá seguramente reacomodamientos de valores en función de los cambios que se vayan dando en la economía, pero si la esta se reactiva nuevamente y reaparece el crédito, probablemente los precios se sostendrán o incluso aumentarán”, reflexiona Llambías.
El mercado inmobiliario parece haber empezado este nuevo año con el pie derecho. Aunque tenue por la coincidencia con las vacaciones, se está registrando un aumento en consultas y todo indica que la unificación del dólar facilitará los acuerdos y la concreción de operaciones. “El ánimo crece y la expectativa con poco tiempo transcurrido es mucho más optimista que la de un año atrás. Los indicadores ya demuestran otros números y por eso todos creemos que 2016 será mejor que 2015, pero el despegue vendrá más adelante y dependerá de otras acciones para mejorar el ánimo de todo el mercado como el crédito y el control de la inflación”, concluyó Siwacki.
Por José Luis Cieri, Sábado 6 de febrero de 2016
Publicado en el suplemento Propiedades & Countries del diario LA NACION