Puerto Norte , la nueva estrella del río Paraná.
Es una de las ciudades que muestran un contundente crecimiento residencial con proyectos Premium que miran al Paraná y crean sinergia con otros rubros en alza
Desde que en 1852 fue declarada ciudad con el apoyo del general Justo José de Urquiza, Rosario siempre se caracterizó por su sello cosmopolita. Y aquella impronta poco a poco comenzó a verse reflejada en su arquitectura de tipologías típicamente europeas.
El primer censo provincial (1958), realizado ocho años después de su creación, daba claras muestras de esa diversidad cultural, ya que el 22% de la población era extranjera; índice que para fines del siglo XIX alcanzaba el 49%. Característica que indefectiblemente marcó el vínculo indisoluble que hoy existe entre sus habitantes y el río Paraná.
Por eso, y a diferencia de lo que muchos imaginan, Rosario jamás le dio la espalda al río; por el contrario, vivió y creció a su lado. Primero funcionó como zona portuaria, más tarde -en la parte norte de la ciudad- comenzaron a instalarse las refinerías, las fábricas y los distintos proyectos industriales y productivos en las proximidades de una de las cabeceras del Ferrocarril Central Argentino, que vinculaba la ciudad con el norte y centro del país.
Hoy, a casi 160 años de haber sido declara ciudad, Rosario no sólo pone en valor, sino que resignifica su vínculo con el Paraná haciendo de la zona norte de la ciudad un nuevo polo habitacional que aspira a convertirse en el Puerto Madero de aquella ciudad santafecina. “Esta zona (con una superficie estimada de 145.000 m2) está marcando una tendencia en Rosario no sólo en lo inmobiliario, sino también en lo que se refiere a planificación urbana, y esto se debe a la interacción de todos los proyectos y del plan general realizado por la municipalidad local”, comenta Darío Gioiosa, director comercial de Ciudad Ribera, megaproyecto mixto de siete edificios desarrollado en 2,6 hectáreas (Ahí funcionaba antiguamente el predio Agro Export, un puerto cerealero).
Pero, según lo expertos, Rosario parece no ser la excepción ya que esta tendencia de rescatar el patrimonio y poner en valor la arquitectura es un fenómeno mundial que comenzó a manifestarse con mucha más fuerza en los últimos años.
“Es un fenómeno que se observa en las principales ciudades del mundo, como Londres, Nueva York, incluso Buenos Aires con Puerto Madero. Estas urbes transformaron sus puertos industriales en desuso y los convirtieron en barrios residenciales de lujo, integrados plenamente a la vida cotidiana de la ciudad. Algo que se observa con claridad en los edificios uno, siete, ocho y nueve de Forum, que presentan fachadas de 1890 (allí otrora funcionó primero la Refinería Argentina de Azucar y más tarde la Matería Safac)”, comentó Diego Silberberg, director comercial de TGLT.
Y agrega: “El trabajo de reconstrucción obliga en muchos casos a fabricar ladrillos especiales, dado que los más antiguos no sólo tienen diferente tamaño, sino distinto color de los actuales. En otros casos la puesta en valor de los edificios, muchos de mediados del siglo XX, está centrada en la recuperación de la piedra”.
Los desarrolladores coinciden en que estos proyectos inmobiliarios no sólo permiten recuperar y extender la ribera rosarina, sino que además consolidan los espacios públicos, lo que genera un nuevo punto de encuentro en la ciudad. “Creo que todos apuntamos a que Puerto Norte sea un modelo de gestión que se pueda replicar en todo el país. Creemos que armamos un proyecto único e irrepetible, y eso el comprador, en su mayoría, local nos lo hace sentir”, dice Rodrigo Fernández Prieto, socio de la desarrolla Fernández Prieto & Asociados, que lleva adelante Maui, complejo de dos torres de 44 pisos cada una que ofrece departamentos de lujo, hotelería, oficinas y un exclusivo Club de Agua, a orillas del río.
Para Gioiosa, tanto Puerto Norte como Rosario tienen, a mediano y corto plazo, un promisorio futuro. “Históricamente, Rosario fue una de las regiones más dinámicas y de mayor crecimiento económico del país. Hoy se encamina hacia un enorme desarrollo, a partir del potencial de su complejo agroindustrial y de su ubicación estratégica. Puerto Norte protagoniza un espacio único que marca el desarrollo y crecimiento económico de la zona.”
Target : La mayoría de las consultas por parte de los interesados que se recibieron hasta el momento en los desarrollos permite afirmar que éstos vienen a dar respuesta a una necesidad insatisfecha que hasta el momento tenía el público local. “Los que se acercan a Puerto Norte son en su mayoría personas rosarinos o del interior de la provincia, y en menor medida gente de Buenos Aires y Córdoba. En lo que se refiere a la búsqueda, ven el diferencial del producto; si vemos los desarrollos que suele ofrecer el mercado, vamos a encontrar en Maui, especialmente, un concepto vinculado con la naturaleza y el río”, dice Fernández Prieto.
Y amplía Silberberg: “Este es un lugar buscado principalmente por el consumidor final, y en menor medida por los inversores”.
Tanto los desarrolladores como los brokers sostienen que la nueva zona de Rosario promete convertirse en un fenómeno no sólo inmobiliario, sino también urbanístico de la Argentina. “Puerto Norte va en camino de transformarse en la zona que mayor crecimiento de Real Estate en la Argentina. Este proceso se puede hacer realidad gracias al gran desarrollo económico y cultural que tiene Rosario como una de las ciudades más importantes del país”, concluye Fernández Prieto.
Leandro Murciego, 21 de agosto de 2010.
Publicado por La Nacion.