A pasos de la Capital Federal y también de la avenida General Paz, el barrio concentra casas racionalistas y chalets americanos con jardines y todas las comodidades; los valores, desde 350.000 dólares.
En la zona de Vicente López comprendida entre la avenida General Paz y la residencia presidencial de Olivos, por los corredores de las avenidas del Libertador y Maipú, ofrecen la combinación justa entre movimiento y tranquilidad. Buenos colegios, rápidos y cómodos accesos tanto hacia el centro de la Capital como hacia el Norte, diversidad de negocios, shoppings, supermercados, clubes, mucho verde y proximidad al río son algunos de los condimentos que permiten disfrutar de una amplia oferta de servicios sin perder el carácter residencial, tranquilo y seguro que caracteriza desde siempre a sus calles. En este sector, fundamentalmente en sus calles internas, se encuentran muchas casas y chalets con dos y tres plantas. Y es fácil distinguir el interés que despierta el barrio por su carácter exclusivo, como lo califican sus residentes: “Es una especie de oasis urbano que sorprende tanto a los residentes como a algún que otro turista que recorre sus calles”, expresó Mariano Bellagamba, director de Bellagamba Marketing Inmobiliario.
Sus calles cortadas y sus diagonales, con abundante arboleda, restaurantes escondidos y almacenes típicos son algunos atributos que hacen de este eje un lugar encantador que atrae permanentemente como un imán. Debido a que mucha gente se quiere radicar en la zona, las consultas son numerosas. Al respecto, Félix Nieto Lamas, titular de la firma Nieto Lamas Inmuebles, comentó: “Tenemos muchas consultas para la compra con créditos bancarios en pesos, pero los vendedores aún no están dispuestos a resignar la obtención de dólares a cambio de sus propiedades”.
Mercado en calma
Susana Camps, responsable de residencias de D’Aria Propiedades, comentó: “No se concretan muchas operaciones. Los propietarios se posicionan en valores en alza, basándose en el impulso de hace dos años, momento en el cual las propiedades se actualizaban con un incremento promedio anual del 10%. Los compradores, a su vez, se presentan con ofertas congruentes a la diferencia cambiaria actual, tomando como referencia el dólar oficial, argumentando la devaluación existente y especulando con la situación de estancamiento inmobiliario actual de público conocimiento”.
Las casas más demandadas cotizan desde 350.000 dólares. Se trata de propiedades que rondan los 200 a 250 m² sobre lotes de 300 m², y ofrecen tres o cuatro dormitorios (con por lo menos uno en suite), dependencia de servicio, un ambiente social tipo playroom o quincho, cochera, escritorio y un jardín mínimo de 100 m2.
Las viviendas de estilo racionalista y los chalets americanos son los más buscados; ya sea por su calidad constructiva como por su distribución, siempre actual, tienen un gran potencial para ser reciclados.
El target que busca comprar es de clase media alta o alta. En general son matrimonios de 35 a 50 años, con dos o tres hijos y servicio doméstico permanente.
“Quienes buscan una casa en la zona cuentan con ahorroscomo para encarar una compra sin recurrir a un crédito hipotecario. El promedio de antigüedad de las casas es del orden de los 50 años”, agregó Nieto Lamas.
Por otra parte, esta zona experimentó en los últimos años un crecimiento importante no sólo por los desarrollos privados residenciales y edificios de oficinas, sino también por los corredores verdes y las mejoras en la zona del río, como los parques recreativos y el Paseo de la Costa.
Javier Igarzabal, director de DIC propiedades SA, explicó: “Los interesados en general son empresarios, profesionales o ejecutivos de empresas con un muy buen nivel económico que desean vivir cerca de sus respectivos trabajos”.
En la zona no existen prácticamente terrenos libres, por lo cual no se puede aventurar un costo de construcción. Pero en términos generales, la refacción de una casa demanda no menos de 300 dólares el m2, que se puede extender hasta los 1200 dólares el m2 en una edificación de muy buena calidad. Por otra parte, el valor del m2 de tierra en la zona se cotiza entre 500 y 600 dólares. No obstante, Bellagamba agregó: “Un proyecto terminado a estrenar promedio cotiza entre los 450.000 y 800.000 dólares, en un mercado dominado por la falta de oferta”.
Por Javier Reyes, Sábado 02 de noviembre de 2013
para el suplemento Propiedades & Countries del diario LA NACION