Village Recoleta: Un shopping que se aggiorna

Con locales y cines: Criba remodela el tradicional Village de Recoleta, que tendrá casi 45.000 m2 y se inaugurará en 2011

En pocos meses, los amantes del cine, los que optan por comprar en los centros comerciales cubiertos o los que prefieran aprovechar el día saliendo de casa tendrán en Buenos Aires un nuevo punto de encuentro.

Se trata del Village Recoleta Mall, remodelado espacio de Vicente López y Junín en el que hasta hace un tiempo funcionó el complejo de cines, y que se convertirá en un lugar de esparcimiento que tendrá un desarrollo aproximado de 45.000 metros cuadrados.

“Es una gran satisfacción que hayan confiado en nosotros para remodelar el Village Recoleta y transformarlo en un complejo muy confortable, que seguramente captará tanto al público local como a los turistas que transitan por la zona”, explica Santiago Tarasido, director comercial de Criba, empresa que lo construye.

La versión aggiornada de este complejo que atrae a gente de todas las edades no sólo será un punto para ver estrenos de películas, sino que también contará con 90 locales comerciales.

La obra, iniciada en noviembre de 2009, actualmente se encuentra completada en un 70% y se edifica bajo la proyección del Estudio Bodas Miani Anger (BMA). Tendrá una superficie de 44.920 metros cuadrados y la inversión requerida sólo para la obra civil será superior a los 31.500.000 pesos. En tanto que VC1 (asociación de las empresas Carval + Village Cinemas) es el comitente.

“Se trabaja con un ritmo muy intenso y según lo trazado por el plan. Ya están terminados los trabajos de adaptación de la estructura portante, se está trabajando en las fachadas, en los ingresos sobre ambas esquinas y en las instalaciones y los trabajos interiores”, describe Tarasido.

En etapas

La terminación de obra está prevista en dos etapas: en la primera, que estará lista hacia fin de noviembre próximo, se completarán las salas de cines, el hall de entrada, las fachadas y los servicios de planta baja. En la segunda, para mediados de febrero de 2011, se completará el resto del complejo con los locales comerciales.

El nuevo shopping contará con cambios no sólo edilicios, sino también en su distribución de las áreas. Las boleterías del primer nivel pasarán a la planta baja junto con toda una línea de candy bar . La librería Cúspide se mantendrá en el mismo lugar que ocupaba originalmente de manera similar que la entrada al complejo, aunque las puertas estarán alejadas de la calle con respecto al espacio donde estaban.

“En el centro del lobby se situarán butacones, terminales automáticas y pantallas LCD. La boletería contará con unos 10 puntos de venta. En las dos ochavas habrá ingresos desde la calle que llevarán directamente al primer nivel. En total habrá tres niveles de locales. El primero era donde estaban el patio de comidas y las boleterías. El segundo, donde funcionaba Sacoa, y el tercero el de las salas de cines del piso superior”, detalla Tarasido.

Más ingresos

El Village Recoleta Mall tendrá dos ingresos nuevos por ambas esquinas (Vicente López y Junín y Vicente López y Uriburu), que permitirán acceder directamente al shopping o dirigirse a las salas de proyección. “Esto permite distintas alternativas a la gente que concurra, con lo cual se podrá ir al cine después de pasear o ingresar directamente a las salas, como fue siempre, desde la calle”, amplía.

En cuanto a las 16 salas originales se mantendrán 10 (las que están únicamente en los subsuelos) y con sus capacidades originales. Las dos más grandes que dispondrá el complejo serán provistas de proyectores digitales. El resto del complejo cambiará de función habilitándose como shopping con locales comerciales y gastronómicos.

Aún no están confirmadas las empresas que ocuparán los espacios comerciales, pero se trata de primeras marcas de los rubros habituales que operan en los shoppings, como ropa, librería, informática, celulares, calzados, indumentaria deportiva, entre otros.

Acerca del aspecto constructivo que se utiliza para renovar el Village de Recoleta, Tarasido indica: “La remodelación consiste en la demolición de las grandes losas premoldeadas inclinadas correspondientes a las salas de los pisos superiores, que se reemplazaron por otras planas ejecutadas con hormigón in situ. Todo esto, con el propósito de convertir dichos espacios en locales comerciales.

“Por otra parte, esta intervención obligó a que las áreas afectadas hayan sido rediseñadas funcional y morfológicamente. Se dará además al edificio un interesante cambio de imagen, desmontando completamente la fachada existente y reemplazándola por una moderna ventilada de placas cementicias con color, rematada en ambas esquinas de acceso por grandes marquesinas a modo de atrio”, concluye.

José Luis Cieri, 20 de septiembre de 2010.
Publicado por La Nación.